El desplome registrado por las bolsas de todo el mundo el año pasado y la huída en masa de los inversores de la renta variable han tenido un efecto devastador en el volumen de operaciones cruzadas en las principales bolsas de todo el mundo.
En España, Bolsas y Mercados Españoles (BME) –propietaria de las Bolsas de Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao- negoció en enero un 63,5% menos que en el mismo mes de 2008 cuando batió su récord histórico, mientras que las cifras del grupo alemán Deutsche Börse –gestor de la bolsa de Fráncfort-, muestran una caída del 70%. No mejora el panorama en el británico London Stock Exchange (LSE), donde el descenso fue del 60% y su futuro no se presenta demasiado optimista. Crédit Suisse prevé una caída del 30% del volumen negociado durante los próximos doce meses para el holding londinense.
NYSE Euronext - que gestiona las bolsas de Nueva York, París, Lisboa, Ámsterdam y Bruselas- tampoco ha sido ajena a estos fuertes descensos. Sólo en Europa, las operaciones han caído un 21% en enero, mientras que el volumen en el New York Stock Excghange (NYSE) descendió un 28%.
La matriz transatlántica del NYSE vivió el año pasado un ejercicio de grandes volúmenes de contratación en medio de una fuerte volatilidad de los mercados pero, de cara a 2009, los expertos pronostican un ejercicio complicado.
Goldman Sachs, por ejemplo, opina que el grupo tendrá que nadar con el viento en contra en un contexto económico caracterizado por los bajos tipos de interés en Reino Unido y la zona euro, por lo que decidía recientemente rebajar su recomendación sobre NYSE Euronext a “vender”, al tiempo que revisaba a la baja su previsión de ingresos en un 40%. El grupo obtiene cerca del 50% de sus ingresos totales de París, Lisboa, Ámsterdam y Bélgica.
Menos comisionesEsta fuerte caída de los volúmenes así como de los precios de las acciones ha tenido un impacto inmediato sobre las firmas de intermediación. Las comisiones de los brokers se han resentido a ambos lados del Atlántico. En Estados Unidos, los operadores se han visto perjudicados por el desplome del número de operaciones, ya que sus comisiones están ligadas al número de contratos, no al importe de los mismos.
En Europa, el castigo se ha producido por la pérdida de valor de las acciones cotizadas, ya que en el Viejo Contienen los brokers van a comisión en función del valor de las operaciones intermediadas. Según datos de la World Federation of Exchanges, las acciones cotizadas en los 53 mayores mercados del planeta perdieron el 45% de su valor sólo entre septiembre y diciembre: se evaporaron 6 billones de dólares.
Se disparan las operaciones de deuda corporativa y derivadosPor otra parte, los datos publicados recientemente por las diversas bolsas aportan pistas sobre dónde van los inversores. En el caso de la bolsa española, se observa el mayor apetito por la deuda corporativa. Los graves problemas de liquidez a los que se han enfrentado las empresas en los últimos meses han provocado una auténtica avalancha de emisiones de deuda empresarial orientada a captar efectivo y ha quedado perfectamente plasmado en los mercados.
En enero de este año, se han negociado en este apartado 359.130 millones de euros, el triple que el año pasado. También han aumentado significativamente las operaciones de derivados, con un crecimiento del 48% en el número de contratos. La negociación de opciones sobre acciones ha crecido un 112%, y un 111% la de los futuros sobre acciones.
Estos porcentajes contrastan, no obstante, con los registrados por CME Group, el mayor mercado de futuros por actividad de contratos. El volumen negociado en enero fue un 41% inferior al registrado el mismo mes de 2007.