El beneficio neto de Caja Extremadura se situó en 30,4 millones de euros en el primer semestre, con un descenso del 8,2 por ciento respecto al ejercicio precedente, debido, fundamentalmente, a las dotaciones voluntarias "practicadas con el objetivo de fortalecerse ante la incertidumbre económica existente", informó la caja.

De esta forma y por tales motivos, la entidad extremeña explica que ha destinado el 50 por ciento de su beneficio recurrente "a la realización de provisiones para la cobertura de sus riesgos".

Caja de Extremadura añade que aún "mantiene intactas sus provisiones genéricas, no habiendo hecho uso de las mismas", y adicionalmente ha constituido "un volumen de fondos para riesgos subestándar" --aquellos que se constituyen para cubrir operaciones que no estando dudosas sí se engloban dentro de sectores económicos o clientes que presentan un mayor riesgo inherente-- por un importe superior al que actualmente mantiene para la cobertura genérica.

Caja Extremadura destacó hoy, una vez recabados los resultados del primer semestre de 2009, que la composición de los activos de la entidad "continúa mostrando su elevada calidad", con un volumen de "dudosos" del 3,30 por ciento, "porcentaje notablemente inferior" al 4,85 por ciento de media del sector de las cajas de ahorros.

En conjunto, la entidad extremeña resalta que la evolución de negocio y los resultados de la primera mitad del año "teniendo en cuenta el contexto de importante desaceleración en el ritmo de la actividad económica, refleja que la inversión crediticia se ha situado en un volumen de 5.850 millones de euros, con un crecimiento del 1,5 por ciento respecto a junio del ejercicio precedente".

Por su parte, el volumen de recursos ajenos ha experimentado un aumento interanual del 9,2 por ciento, cerrando el semestre con un volumen de 6.548 millones de euros, apunta la caja en una nota de prensa.

Caja Extremadura precisa que ha continuado aplicando "una política de prudencia, destinando importantes recursos al fortalecimiento" de su solvencia, para lo cual ha realizado en el primer semestre del año unas dotaciones voluntarias de 31 millones de euros, lo que sitúa su nivel de cobertura de los riesgos dudosos en el 113 por ciento, "más del doble del porcentaje que mantiene en su conjunto este sector".

"En un semestre marcado por las elevadas dificultades generadas por el actual contexto económico en el que se desarrolla la actividad financiera, la Caja de Extremadura ha alcanzado significativos crecimientos en todos sus márgenes de negocio y de explotación. El margen de intereses, diferencia entre lo que se paga a los clientes por los depósitos y los ingresos obtenidos por sus inversiones, ha aumentado un 8,4 por ciento", apostilla.

El control de costes es un capítulo en el que la entidad explica que continúa realizando un "estricto seguimiento durante los últimos ejercicios", lo que ha permitido situarse "en los primeros puestos entre las Cajas de Ahorros más eficientes".

Apunta así que en este primer semestre los gastos de administración han experimentado un descenso del 3,5 por ciento, lo que ha favorecido que el resultado de las actividades de explotación bruto (beneficio recurrente) haya experimentado un crecimiento del 13 por ciento y que su ratio de eficiencia se sitúe en el 37,1 por ciento, lo que supone una mejora de 3,7 puntos porcentuales en los últimos doce meses.

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