Las bolsas asiáticas despiden la semana en positivo. Las principales plazas de la región han registrado subidas impulsando los principales índices desde los bajos niveles con los que han empezado el año, el peor comienzo desde 1990 y ayudadas por las compañías tecnológicas y por un yen más débil, que mejoró las expectativas de ganancias de las exportadoras japonesas.

El Nikkei de la Bolsa de Tokio ganó un 1,5% al cierre, hasta los 7.568,42 puntos, gracias al acuerdo entre el Gobierno estadounidense y el banco Citigroup. Por su parte, el índice Topix avanzó un 1,9% hasta los 756,71 puntos. El índice Kospi del mercado surcoreano cedió al cierre de hoy 8,24 puntos (0,78%) y terminó la sesión en las 1.063,03 unidades. El indicador de valores tecnológicos Kosdaq cayó 4,56 enteros (1,27%) hasta los 363,21.

LG Display, el segundo mayor fabricante de pantallas de cristal líquido, subió un 5,3% después de que Goldman Sachs elevara el precio objetivo de sus acciones y Nintendo subió un 3,1% en Osaka por el debilitamiento de la divisa japonesa, que llegó a su nivel más bajo frente al dólar de los tres últimos meses. Por otra parte, Woolworths, el mayor minorista australiano, perdió un 4,4% por la reducción de sus expectativas de beneficio. La también australiana Telstra, mayor compañía telefónica del país, se dejó un 3,3% por la recomendación de vender que hizo Citigroup.

"Hay algunos puntos de luz" en las bolsa asiáticas, según las declaraciones recogidas por Bloomberg de uno de los analistas de Pengana Capital, en Melbourne. La jornada había comenzado con resultados mixtos en el sudeste de Asia, con ligeras ganancias en Vietnam, Tailandia e Indonesia.

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