Las exportaciones china cayeron en marzo por quinto mes consecutivo, incrementando la presión sobre el Gobierno para que adopte medidas encaminadas a estimilar la demanda interna que permita revivir el crecimiento de la tercera mayor economía del mundo. Las ventas al exterior cayeron un 17.1% hasta 90.290 millones de dólares respecto al mismo mes del ejercicio anterior, mientras que las importaciones disminuyeron un 25,1%, dejando el el superávit comercial en 18.560 millones de dólares. Las exportaciones a la Unión Europea cayeron un 20,2% y a Estados Unidos, un 12,6%.

El colapso del comercio así como el menor ritmo en siete años de China, ha costado ya millones de puestos de trabajoy ha llevado al Gobierno a poner en marcha un plan de estímulo económico de 585.000 millones de dólares. Para impulsar el consumo, China está financiando la compra a de televisiones y frigoríficos en las zonas rurales y espera un aumento del 29% de las prestaciones sociales este año.

El descenso delas exportaciones, pese a lo abultado, ha sido menor que en febrero, cuando cayeron un 25,7%. Los economistas consultados por Bloomberg esperaban una caída del 20%.

Signos positivos

Pese a los descensos, los datos comerciales muestran "signos positivos", según el Gobierno, la venta de productos como ropa, muebles o zapatos ha aumentado respecto a un año, mientras que el valor de las importaciones se ha estabilizado. Descontados los efectos del calendario, los datos muestran un aumento del 32,8% de las exportaciones respecto al mes anterior y del 14% de las importaciones.

Los datos de las exportaciones podrían reflejar "una modeta mejora en la demanda mundial", comenta a Bloomberg el analista jefe de renta variable de JP Morgan en Hong Kong.

Algunos economistas esperan que las exportaciones chinas revivan a finales de este año al tiempo que la economía mundial se estabiliza y la situación comercial se recupera.

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