Incremento de la morosidad, necesidad de provisionar la mora de 2009, hundimiento de los márgenes ante la caída del euribor… El año próximo puede ser realmente el annus horribilis de la banca y mejor ir ajustando lo que se puede ajustar: las comisiones. Y es que las entidades han disparado en el último año lo que cobran por prácticamente en todos sus servicios. Sir ir más lejos, la cuota anual que se paga por las tarjetas de débito se ha incrementado de media un 12,9% desde junio del pasado año. En 12 meses se ha pasado de abonar 14,02 euros a 16,11 de promedio, según los datos hechos públicos la semana pasada por el Banco de España.

Una evolución muy similar a la que presentan las tarjetas de crédito, cuya cuota anual se situó a 30 de junio de 2009 en 32,43 euros frente a los 29,62 de un año antes; el incremento se sitúa en este caso en un nada desdeñable 8,6%. Hasta ahora la banca se ha beneficiado de la caída histórica de los tipos de interés, que le ha permitido captar dinero a buen precio, y de que hasta ahora sólo ha tenido que cargar en sus cuentas el 25% de los créditos declarados morosos este año. El año que viene tendrán que tirar de provisiones genéricas o de resultados para provisionar la morosidad. La revisión a la baja de las hipotecas limitará sus márgenes.

En este escenario, mejor ir arrimando lo que se pueda. De este modo, las comisiones de las cuentas corrientes y de ahorro también se mueven al alza. Por ejemplo, la cuota de mantenimiento de las primeras alcanzaba en junio de 2009 los 20,80 euros por semestre, frente a los 19,82 euros del año anterior, lo que arroja un incremento más moderado del 4,7%. Sin embargo, si la entidad que menos cobraba hace un año por mantener la cuenta limitaba la cuota a 9,02 euros, ahora la que menos recibe establece una comisión de 12,50 euros al semestre, nada menos que un 27,84% más. El banco o caja que más cobra por mantener una cuenta corriente fija una comisión de 42 euros al semestre.

En el caso de las cuentas de ahorro, se ha pasado de un valor medio de 18,98 euros de comisión de mantenimiento semestral en junio del año pasado a 19,96 en junio del presente ejercicio. La trayectoria seguida es muy similar a la de las cuentas corrientes: la entidad financiera que menos cobraba por este concepto hace un año percibía 9,02 euros; un año después carga en cuenta 12 euros cada semestre. La comisión por descubierto en las cuentas alcanza a 30 de junio de 2009 los 10,48 euros, frente a los 10,05 a 31 de diciembre de 2008.

Transferencias e hipotecas también suben

Los créditos, tanto hipotecarios como personales, no se han librado de este incremento de las tasas. La cuota cargada por las entidades financieras por el estudio de una hipoteca se ha situado ya en 98,29 euros, cuando a comienzos de 2008 era de 89,20 euros. En apenas año y medio, más de nueve euros de alza. Más notable es el incremento en la comisión de apertura: se estableció a 30 de junio de 2009 en 573,76 euros frente a los 551,95 en que evolucionó durante todo el año 2008 y hasta marzo de este año. Más de 20 euros adicionales. Las comisiones por cancelación anticipada y la subrogación, no obstante, se mantienen.

En el caso de créditos no hipotecarios, el estudio es en este momento cuesta 83,69 euros y la apertura 104,84. En enero de 2008 la comisión de estudio alcanzaba los 79,07 euros y la de apertura los 99,37 euros. Diferencias en este caso menos acusadas. De acuerdo con los datos del Banco de España, las comisiones por transferencias nacionales y por el cobro de cheques procedentes de otra entidad también suben. En el primer caso, y si la operación se realiza sobre la propia plaza, el valor medio de la cuota es 3,30 euros; en junio de 2008 era de 3,14 euros. El cobro de cheques lleva implícita una tasa de 2,59 euros; hace un año apenas 2,27.