Cherie Blair (Foto Reuters)

Dos fondos de pensiones británicos han contratado al bufete de abogados de Cherie Blair, la mujer del ex primer ministro británico Tony Blair, para que los represente en la demanda presentada contra el Royal Bank of Scotland (RBS) y su anterior director ejecutivo, Fred Goodwin, por ocultar la gravedad de la situación de la entidad, que finalmente condujo a una nacionalización parcial.

Según confirmaron las dos compañías a diversos medios de Reino Unido, la denuncia se ha interpuesto ante el tribunal de Nueva York y podría suponer cientos de millones de euros, ya que los afectados acusan tanto al banco en su conjunto, como a su ex gerente en particular, de "garantizar falsamente" a los inversores que las cuentas se encontraban en orden.

No obstante, posteriormente se demostró que los responsables de RBS eran conscientes de la insolvencia a la que había conducido el montante de los activos tóxicos, argumento principal de los fondos de pensiones denunciantes, de los condados de North Yorkshire y Merseyside, los cuales cuentan con un valor total de alrededor de 4.000 millones de libras (unos 5.100 millones de euros).

La anterior junta directiva del RBS figura en la demanda, incluido el ex director Tom McKillop, pero el acusado principalmente es Goodwin, tildado de "arrogante" por insistir en una estrategia de crédito y adquisiciones que acabaron conduciendo a la entidad a la quiebra y obligando al Gobierno a asumir el 65 por ciento del accionariado para rescatarla.

Denuncia en Estados Unidos

El motivo de promover acciones en una corte norteamericana responde a que las demandas colectivas son más comunes en Estados Unidos, donde los tribunales son más flexibles y menos caros, si bien es menos habitual en el bufete de Cherie Blair, Ms Booth QC, especializado en Derechos Humanos y normativa laboral.

En este sentido, aunque tanto la compañía como los fondos que han promovido la denuncia son británicos, pueden llevar el proceso a Estados Unidos debido al importante nivel de negocio con el que el banco llegó a contar en el país, especialmente después de que, según Blair, "muchos de los problemas" que produjeron su debacle se originasen en las operaciones al otro lado del Atlántico.

En consecuencia, el proceso está abierto a que se sumen inversores europeos y norteamericanos y la propia abogada responsable ya ha avanzado que tratará de coordinar a otros accionistas "con el objetivo de asegurar Justicia para el mayor nivel de afectados como sea posible".

Protección

Según explicó al diario 'The Times, había asumido el caso por las "pérdidas masivas" provocadas en los proyectos de pensiones locales y otras instituciones británicas que constituían los principales inversores de RBS. "Se trata también de proteger a los inversores del futuro mediante un aumento significativo de los estándares de la buena gobernación de las principales empresas de Reino Unido", añadió.

Así, uno de los retos de Ms Booth QC para este proceso es promover un cambio sustancial en la gestión corporativa de RBS, para lo que el gabinete ya está trabajando con Coughlin Stoia Geller Rudman & Robbins, el bufete californiano que logró una compensación de 7.000 millones de dólares para los inversores de Enron. Por su parte, RBS ha rechazado pronunciarse.

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