Afectados por Lehman: "Si llegamos a saber que era un bono de un banco de EEUU, nos habríamos salido"
Afectados por Lehman se manifestaron ayer en Madrid (Efe).
La manifestación de un centenar de afectados por la quiebra Lehman Brothers, que tuvo lugar ayer al mediodía en la puerta del Banco de España, dejó una estampa de lo más variopinto: desde las señoras con abrigo de piel y los señores con traje caro -los típicos clientes de banca privada-, a numerosos hijos de ancianos que viven un verdadero drama porque han perdido los ahorros de toda una vida. Pero todos coinciden en dos cosas fundamentales: en que nadie les dijo que los productos "totalmente seguros" que les estaban vendiendo podían perder todo su valor si quebraba Lehman; y en que toda la culpa es de las entidades que colocaron esos productos y que ahora les han dejado "tirados".
"Es como si te compras una lavadora en El Corte Inglés y se estropea, y entonces el dependiente te dice que él no puede hacer nada y que vayas a reclamar al fabricante de la lavadora", resume gráficamente la situación una clienta madrileña de Banif, el banco privado del Banco Santander y la entidad más afectada por el escándalo: el importe en estos títulos comercializador por Banif alcanza un mínimo de 300 millones de euros, pero algunas fuentes del sector lo elevan hasta 700 u 800. Un portavoz del banco privado declinó responder a las preguntas de
El Confidencial al respecto.
Las quejas por el desentendimiento de las entidades tras la quiebra de Lehman son unánimes y no se refieren sólo a Banif, sino a un colectivo muy numeroso de entidades: las pancartas de los afectados señalaban a Espirito Santo, Citigroup, Bankinter, Barclays, Crédit Suisse, Deutsche Bank, BBVA, Bankpime o Altae (Caja Madrid). Algunas de estas entidades han declarado públicamente no tener "nada" en Lehman, lo que indigna más todavía a sus clientes afectados.
"En Banif me han dicho que no tenía derecho a que me recibiera un gestor porque sólo tenía 50.000 euros, y que me atendían haciéndome un favor", relata otra afectada. Un tercero muestra su indignación porque Bankinter le ha ofrecido ayuda jurídica para ponerse a la cola de acreedores de Lehman "y recuperar el 10% de mi dinero". Por supuesto, todos los manifestantes creen que los bancos que les colocaron los productos deberían devolverles íntegramente su dinero y que ellos -los bancos- deben ser los que se pongan a la cola de los acreedores del banco norteamericano.
Nadie sabía que eran bonos de Lehman"Si llegamos a saber que era un bono de Lehman, nos habríamos salido en cuanto empezó la crisis, aunque tuviéramos que pagar penalización", explica un profesor de inglés cuya madre ha perdido todos los ahorros de su vida en uno de estos productos y que pensaba que había contratado un depósito a plazo fijo. "El problema principal es de confianza: todos compramos estos productos porque nos fiábamos de unas entidades con tanto nombre y tanto prestigio, porque pensábamos que estaban cuidando nuestro dinero", asegura un cliente de Altae.
Además, casi todos coinciden en que, cuando empezaron a ver las orejas al lobo, los comerciales de las entidades les aconsejaron no vender: "Yo tenía un bono referenciado a la cotización de Santander y BBVA, y de repente veo que el bono pierde el 80% sin que las acciones hayan caído tanto. Algo que era imposible incluso en el peor escenario que contemplaba el folleto. Cuando pedí explicaciones, me dijeron que el mercado siempre sobreactúa y que, si esperaba hasta el vencimiento, no tendría ningún problema", relata otro cliente de Banif.
Un afectado valenciano cuyos ancianos padres han perdido 180.000 euros explica que "les convencieron para no sacar el dinero porque el producto era totalmente seguro y les asustaron con la penalización por retirar el dinero antes de tiempo". Hay quien asegura incluso que su entidad estuvo vendiendo estructurados de Lehman hasta agosto de este año, cuando era evidente que el banco de inversión estaba al borde de la quiebra.
La ira de los perjudicados no sólo se dirige contra las entidades, sino también contra el Banco de España y la CNMV por desentenderse del problema y dejarles desprotegidos. Otro de los blancos de los ataques fue
Emilio Botín "que ahora anda comprándose bancos en EEUU con nuestro dinero" -la desesperación siempre mezcla churras con merinas-. En especial, les duele el anuncio del Santander en el que asegura que su compromiso con el cliente es para siempre. El Gobierno tampoco se libra: "¿Por qué Zapatero tiene que socorrer a la banca que nos ha robado? ¿Por qué no nos ayuda a nosotros?", gritaba un madrileño que no podrá comprarse la casa para la que estaba ahorrando.
Hay quien acusa también a
George Bush porque Lehman es la única entidad que no ha sido rescatada en la crisis, de forma incomprensible para estos ahorradores. Pero, en general, los afectados prefieren olvidarse de Lehman: "A mí me da igual que haya quebrado Lehman o quien sea, porque a mí nadie me ha vendido un bono de Lehman, sino un producto de Banif y Axa que me garantizaba el 100% de mi dinero, que es lo que quiero".
Demandas basadas en la publicidadLos afectados de toda España están manteniendo reuniones para presentar demandas conjuntas, aunque parece que habrá varias de la mano de distintos despachos de abogados. El que más perjudicados aglutina es Mas y Calvé, "los del 11-M". Respecto a las posibilidades de ganar en los tribunales, muchos
reconocen que lo ven difícil porque en la letra pequeña de los contratos aparecía Lehman en algún sitio, pero confían en que el juez considere que era insuficiente la información de los folletos publicitarios, "que tiene valor contractual", como recuerda una de las manifestantes más activas.
Un estructurado es cualquier producto que ofrezca, por ejemplo, una rentabilidad del 10% si una acción o un índice supera el valor inicial en un plazo determinado. Los más sofisticados son los autocancelables (si se cumple la condición, pagan un cupón muy alto y vencen). Se componen de un bono (de Lehman en este caso) y de una opción, que es la que aporta la rentabilidad en caso de que se dé la condición del producto. Cuanto más alto es el cupón que paga el bono, más se puede pagar por la opción y más rentabilidad puede dar el producto. Por eso, los estructurados basados en bonos de Lehman eran muy populares, ya que sus diferenciales sobre el Libor eran de entre el 3% y el 5% debido a su pobre calidad crediticia.
En caso de quiebra, estos productos se consideran deuda senior del banco, lo que supone que están los primeros en la prelación de acreedores del banco, aunque sólo podrán recuperar un porcentaje del dinero invertido. Ni siquiera
los productos garantizados se salvan si la garantía la proporcionaba el mismo Lehman, ya que en caso de quiebra no hay diferencia entre activos con garantía o sin ella.
45. 
eldelamudanza14/10/2008, 20:22 h.
¿Cliente de banca privada con menos de 100.000 euskos?
¿Pero sabe usted lo que es la banca privada, buen hombre?
Con 300.000 te recibe un "gestor" que suele ser un niño recien salido de parbulos, con suerte, y eso tampoco es ser cliente.
5-6 millones y ya empieza usted a tener derecho a Moet si la cita es a la hora del aperitivo. De ahí para abajo, cava, y malo.
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44. Recaredo II14/10/2008, 19:51 h.
Totalmente de acuerdo con el de allá (43) y otros tantos de más acá. Me parece que si algo quedó claro (o al menos debería de haber quedado claro) con el tema de los sellos (Afinsa y Forum) es que a mayor rentabilidad mayor batacazo (no mayor riesgo, no. Mayor batacazo) que al final siempre se produce, siempre, salvo que sepas salirte a tiempo. Pero para eso hay que estar muy pendiente, continuamente encima de la inversión(como en Bolsa), y dormir como las liebres, con un ojo abierto para, a la mínima, saltar.
Lo cual no es para perfiles tipo abueletes ni comodones que meten allí todo su dinero confiando en un trincón encorbatado que, por el mero hecho de enseñarle una sonrisa profidén (o en el caso de trincona escotada, aparte de sonrisa trata de que te fijes en algo más que en el estructurado)y decir cuatro gilipolleces con voz solemne y ademanes de firmeza (todo ello ensayado hasta la saciedad en la seminario de ventas), por todo ello, van y pican confiándoles una pasta gansa.
Los experimentos, señores, con gaseosoa. Yo ya he recibido algún que otro escarmiento, pero como siempre ha tratado de poner los huevos en distintas cestas, pues eso que mantengo: los huevos.
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43. el de allá14/10/2008, 19:25 h.
Me sabe muy mal, pero estos son los mismos que sacan pecho delante de los "tontos" que tenemos letras y/o depósitos con rentabilidad normal. Lo que ha pasado en el mercado es una catástrofe y estos señores tienen que asumir su riesgo de catástrofe para recibir cupones del 8% en lugar del triste 3% que recibimos los mortales normales. Si les devuelven el dinero yo tb quiero reclamar que me paguen el diferencial entre mi 3% y el 8% que se han llevado esos señores en los últimos años.
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42. arana14/10/2008, 17:38 h.
Kafka
El que te equivocas eres tú. Con menos de 300.000 euros no eres cliente de banca privada de Banif, otra cosa es que luego te lleves parte y por eso no te "borren", pero de inicio no lo eres. Si quieres inténtalo.
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41. conocido14/10/2008, 17:24 h.
Para pepe_londres: Disculpa si no me he explicado bien. A parte de los estructurados, también comercializaron participaciones preferentes puras y duras que ni están referenciadas a ningún valor, ni a la evolución del Ibex o similar. Me refería a esos productos.
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